Nombrantes enjaezados
Por Juan Pablo Picazo
Lo nombran todo:
las islas, la gente y las banquetas.
Bautizan nubes,
mascarones de proa relujan
para exhibir
exorbitantes nombres.
Enjaezados
se lanzan a la batalla
más por exponer
sus cotas y sus yelmos
que por fundar, liberar o hacer justicia.
Dictan sus hazañas
a los historiadores,
y escriben ellos
pensando en pan y gachas.
Pero todos mienten:
los defensores del negro trono
y los andantes caballeros del asedio.
Juegan y se matan cordialmente,
sonríen y mueren con honor
mientras,
en los márgenes,
los demás morimos de hambre,
sed y frío.
Entre tanto
habrá magos,
honrados cabalistas,
profetas,
y progresistas varios
azuzando
en pos de las masivas guerras
en nombre del amor,
las lágrimas del sauce
y otros obtusos dioses.